jueves, 14 de junio de 2012

Premio Príncipe de Asturias



El comité del Príncipe de Asturias ha valorado la "neutralidad" del Movimiento de la Cruz Roja y su ayuda en la "lucha contra el sufrimiento".
En este sentido el comité ha destacado sus actuales actuaciones en lugares como Siria, Libia y Somalia así como en desastres naturales recientes como el terremoto de Haití o los tsunamis de Indonesia y Japón, "haciendo respetar la dignidad de las personas".

"Posibilitan una vida sana y segura y promueven la inclusión social y una cultura de no violencia y de paz", rezan las motivaciones para la concesión del galardón asturiano para la Cooperación Internacional.
Cruz Roja Internacional siempre evita ponerse del lado de unos u otros, sea cual sea el conflicto, igual que hacen otras organizaciones humanitarias como Médicos Sin Fronteras. Su objetivo es paliar el dolor de la población sin juzgar a ninguna parte.
Considerada la mayor red humanitaria del mundo (con más de 100 millones de voluntarios en más de 180 países), la misión de Cruz Roja, que había sido candidata a este galardón y al de la Concordia en varias ocasiones, es prevenir y aliviar el sufrimiento humano, proteger la vida y la salud, y hacer respetar a las personas en tiempo de conflicto armado y en otras situaciones de urgencia.
Los orígenes de Cruz Roja
El germen de esta organización se gestó cuando Henry Dunant, tras la batalla de Solferino (Italia) en 1859, organizó a la población para socorrer a más de 40.000 personas que yacían muertas o heridas sin atención alguna y propuso crear sociedades nacionales de socorro para ayudar a heridos en combate, lo que marcó el camino hacia los futuros Convenios de Ginebra.
En 1863 Dunant, que obtuvo el Premio Nobel de la Paz en 1901 junto a Fréderic Passy, y otros cuatro ciudadanos de Ginebra fundaron el Comité Internacional para el Socorro de los Heridos que más tarde daría lugar al Comité Internacional de la Cruz Roja.
La imparcialidad como bandera
Un año después doce gobiernos adoptaron el primer Convenio de Ginebra que garantizaba la ayuda a los heridos en el campo de batalla y definía los servicios médicos como neutrales.
El Movimiento Internacional evolucionó hacia las tres líneas de trabajo que afronta en la actualidad, cuidando siempre hacerlo desde la mayor imparcialidad posible:
  • acción humanitaria con las víctimas de los conflictos bélicos y de otro tipo en tiempo de paz
  • ayuda en desastres naturales
  • la acción preventiva y en favor del bienestar social y de la calidad de vida.
El galardón está destinado a reconocer a la persona, institución, grupo de personas o instituciones cuya labor haya contribuido de forma ejemplar y relevante al mutuo conocimiento, al progreso o a la fraternidad entre los pueblos, según establecen sus bases.

viernes, 8 de junio de 2012

El zoon politikon


Aquí os adjunto una noticia que es verdaderamente estremecedora: la matanza de perros callejeros en Ucrania por la llegada de la Eurocopa 2012.

http://www.schnauzi.com/masacre-de-perros-en-ucrania-para-preparar-la-eurocopa-2012/

Al ver esta noticia he recordado el reciente ejercicio de clase que llevaron a cabo Sonia y Mireia, en el intentaban debatir sobre si el hombre es bueno por naturaleza o malo. Esto desencadenó en una gran polémica en la que yo defendía la postura de que los hombres somos animales racionales, cosa que nos diferencia del resto de los animales.
Volviendo a la noticia, creo que los seres humanos por estar dotados de uso de razón, de un lenguaje (no como los animales) tenemos los medios suficientes para hacer valer nuestros derechos, por las vías del derecho o las de hecho. El humano está capacitado para expresar su falta de afecto, hambre, sed, miedo e incluso dolor. En el animal no sucede lo mismo. ¿Pero es el hombre tan distinto al animal? En mi opinión no, el animal también siente igual que un humano, solo que hay humanos que se niegan a reconocerlo.
Creo que ningún hombre debería de tener en su mano el poder de destruir a otro animal.